Valdano, que tenía contrato con el Real Madrid por otras dos temporadas, ha sido desplazado a lo largo del curso por un Mourinho que siempre le vio como un enemigo en el club y que quería línea directa, sin mediadores, con Florentino Pérez. El presidente blanco siempre ha tenido la máxima confianza en el argentino, tanto en su anterior etapa como en ésta, pero ha terminando cediendo a las presiones de su entrenador.
La relación entre ambos ha sido insostenible desde un primer momento. Hay quien cree que Mourinho nunca perdonó unos artículos que el directivo escribió en el diario ‘Marca’ en los que criticaba el juego del Inter y del Chelsea, cuando él era el entrenador, pero lo cierto es que no le ha pasado ni una y poco a poco ha logrado apartarle de la primera plantilla hasta reducir su función a la de un mero portavoz.
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