El único jugador que ha salido mal parado de la última jornada de Liga ha sido Kaká, que a lo largo de la semana no ha podido trabajar al mismo ritmo que sus compañeros.
El domingo lo hizo en el interior de las instalaciones de Valdebebas, el lunes corrió en solitario al margen de sus compañeros y este martes no se le ha visto por el césped de la Ciudad Deportiva en los quince minutos con acceso para la prensa.
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