Esta práctica, la de llamar a jugadores de equipos filiales en estas sesiones de preparación, es completamente habitual en el Real Madrid y en todos los equipos con una amplia nómina de jugadores internacionales. La única diferencia es que esta vez, uno de esos jóvenes era el hijo de Zinedine Zidane, leyenda blanca y, a su vez, destacado directivo del equipo blanco.
Además de desatar algún tipo de especulación sobre el posible trato de favor por tratarse del hijo de Zinedine Zidane, podría esconder un problema más grande en la cantera del Real Madrid. Si la 'Fábrica' blanca ya se lleva alguna que otra crítica por no nutrir de jugadores al primer equipo, el boom mediático de que Enzo Zidane entrenara con el primer equipo, puede haber supuesto otro problema para el equipo blanco.
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